Miles de pobladores del pacífico nariñense huyen del conflicto armado.
En situación de desplazamiento forzado se encuentran las familias de varios municipios de Nariño, suroccidente colombiano, debido a los enfrentamientos entre grupos armados ilegales y sin recibir ningún tipo de ayuda humanitaria.
Estos hechos empezaron en diciembre del año pasado y se han agudizado en los primeros días de enero, afectando, en gran parte, a comunidades afrocolombianas e indígenas de la zona, por lo cual se hace el llamado urgente a las entidades nacionales e internacionales para intervenir ante el preocupante panorama de orden público.
Los constantes enfrentamientos han afectado gravemente a cientos de niños, adolescentes y adultos mayores, especialmente. Lo más preocupante de todo es que los pobladores desplazados no han recibido ningún tipo de ayuda y su futuro es incierto, pues los grupos armados se disputan el control del territorio. Además, en algunas zonas se desconoce la situación por temor de los habitantes a denunciar y el abandono estatal.
Exigen entonces al Gobierno Nacional el debido cumplimiento de los Acuerdos de Paz, ya que la negativa de su implementación y la falta de presencia del Estado, son causas de este conflicto que azota esa zona del territorio colombiano y que continúa violentando los derechos humanos de los pueblos indígenas del país.
Por: Programa de Comunicaciones CRIC