Hablar un idioma ancestral es resistir, es mantener viva la tradición de todo un pueblo que guarda la memoria de sus antepasados y la honra desde su pensamiento. Tras más de 500 años de invasión, algunos pueblos siguen en la resistencia milenaria practicando sus costumbres y tradiciones.
Tras tantos años y con las dinámicas que hoy en día se dan en los diferentes territorios, han surgido estrategias y modalidades para continuar con este importante legado de conservación y preservación partiendo desde la orientación de que los niños son el presente y el prometedor futuro de todo un pueblo ancestral.
A razón de estos motivos y como forma de continuar en el aprendizaje de estos importantes procesos, se realizó en Mosoco, Páez-Tierradentro el primer encuentro de semilleros o nidos lingüísticos; iniciativas autónomas que han cogido fuerza desde los territorios con el amor y el empeño de mantener viva la lengua indígena Nasa Yuwe. Durante tres días, experiencias de diferentes zonas se reunieron y compartieron en el trueque, la conversa, las dinámicas, la pintura y la reflexión alrededor de este importante tema.
“Compartir y aprender de las demás experiencias de los de más territorios que tienen muy fortalecido el idioma nos ayuda mucho a obtener herramientas para nosotros aplicarlas” expresó uno de los dinamizadores asistentes de la Çxhab Wala Kiwe, territorio de Las Delicias. Así, la conversa de las comisiones se centró en reflexionar acerca de la importancia de enseñar el idioma propio desde el hogar, pues es con el ejemplo que se enseña de una manera integral. “No es solo hablar el idioma, ahí viene todo un tema espiritual, de gobierno propio, de autonomía, de vestimenta propia; es algo integral, es un todo” expresó Fidel Liz, líder del territorio de Togoima.
De esta manera, mediante la minga de pensamiento de territorios como Çxhab Wala Kiwe ACIN, Rionegro, Huila-CRIHU y los semilleros existentes en Páez se llevaron importantes pensamientos que ayudarán a dinamizar estos espacios con la ayuda de los padres de familia, las autoridades y la comunidad en general pues, al fin y al cabo, este es un ejercicio de importancia colectiva como Nasas.
Entre encuentros deportivos, danza, dinámicas, exposición de videos, realización de pintura y muralismo. Todos disfrutaron de un productivo espacio que sentó un precedente relevante frente a estas estrategias de enseñanza y compartir.
La invitación es a hacer la reflexión desde adentro, desde el hogar para analizar qué estamos haciendo para que nuestro idioma propio no muera y se siga regando la semilla de la práctica desde la raíz.
20 de septiembre
Comunicaciones Nasa Çxhãçxha 2021